Llevo tiempo —mucho tiempo— queriendo empezar a compartir mis recetas.
Y por una cosa u otra siempre lo pospongo.
Que si no tengo tiempo, que si me da un poco de pena, que si no sé por dónde empezar...
Así que si estás aquí, leyendo esto gracias.
Este espacio es mi diario de cocina: lo que cocino en mi casa, lo que compro, lo que se me antoja.
No vas a encontrar reglas ni medidas estrictas. Tampoco perfección.
Solo ideas, muchas recetas e ingredientes que me inspiran a comer rico todos los días.
Comidas que caben en mi vida real. Que se preparan mientras pasan otras mil cosas (trabajo, maternidad, etc...)
Cenas sencillas, desayunos que se repiten, comida rica para compartir.
A veces serán recetas. Otras veces, una idea suelta.
Tal vez una lista de súper, una foto, o un snack muy sencillo.
No tengo un plan estricto…
Y para empezar, te comparto una receta que hago mínimo una vez a la semana (siempre con alguna variante).
La hago porque es rápida, rica y a todos nos gusta en casa.
Es una pasta clásica que nos enseñó la mamá de Alex, y yo solo le agregué mi toque con piñones.
Pero si tú tienes almendras, nueces o lo que sea que uses en tu cocina, úsalo. Hazla tuya.
Bavette con cebolla caramelizada, tomate y pesto
(Rinde 2 porciones)
Ingredientes:
180 g de pasta larga (yo uso bavette, pero puedes usar la que tengas)
½ blanca, cortada en tiras delgaditas
1 taza de tomate cherry, cortado a la mitad
½ cucharada de pesto
2 cucharada de piñones (puedes usar nueces, almendras o el mix que tengas)
1 cucharada de aceite de oliva o la cantidad necesaria
¼ taza del agua de cocción de la pasta
2 cucharadas de queso parmesano rallado
Sal al gusto
Preparación:
Cocina la pasta en agua con sal hasta que esté al dente. Guarda un poco del agua de cocción antes de escurrir.
En un sartén, calienta el aceite y carameliza la cebolla a fuego medio-bajo hasta que esté suave y doradita.
Agrega los tomates cherry, una pizca de sal y cocina un par de minutos.
Añade el pesto, los piñones y el agua de cocción. Mezcla bien.
Incorpora la pasta ya cocida y saltea un par de minutos hasta que todo esté bien integrado.
Termina con el parmesano rallado y sirve caliente.
Espero que te animes a probarla esta semana.
Y si le das tu propio toque, me encantaría saber cómo te quedó :)
Jaquie